El alcalde de València, Joan Ribó, ha participado en la cadena humana que han formado centenares de personas a raíz de la convocatoria de la Comisión por una Financiación Justa, “porque la ComunitatValenciana y València necesitan un trato igualitario y justo respecto al resto de comunidades autónomas y ciudades de todo el Estado”. El alcalde se ha mostrado tajante: “No queremos ser más que nadie, pero tampoco los últimos en todo”.
Centenares de personas a título individual, así como representantes de instituciones y entidades de la sociedad civil, sindicales, empresariales y políticas se han unido a esta cadena humana, cuando se cumplen dos años de la manifestación que ya se convocó por las calles de València para reivindicar una financiación justa. El alcalde ha querido “ir más allá, y poner también el foco sobre las inversiones en la ciudad de València. Como alcalde defiendo y defenderé allá donde haga falta un trato igualitario y justo para València”.
El alcalde ha manifestado que “sin una financiación justa no será posible tener unos servicios públicos de calidad para la ciudadanía”, y acto seguido ha nombrado algunas de las principales reivindicaciones de la ciudad en materia de inversiones: “en materia ferroviaria estamos a años luz de donde tendríamos que estar. Reivindico la construcción de un túnel pasante que atraviese la ciudad, con una estación central de pasajeros, y liberar el túnel de Serrería para mercancías, de forma que podamos prolongarlo hasta el límite urbano y conectar el puerto de València, la futura zona intermodal de la Font de Sant Lluís y la factoría Ford con el resto del Estado y de Europa”.
La financiación del transporte metropolitano también ha vuelto a ser “protagonista de mis reivindicaciones. Solo hay que recordarlo en cifras: no puede ser que en los últimos PGE, se destinaran 149 millones para el transporte metropolitano de Barcelona, 126 para Madrid, incluso 49 millones para Canarias y cero euros para València”.
Por último, el alcalde Joan Ribó ha instado a “que el ministerio de Hacienda cumpla con su promesa de asumir la deuda de la Marina de València, tal y como el gobierno de España ha hecho con las Expo de Sevilla y Zaragoza, o con las Olimpiadas de Barcelona”. Y ha reclamado, así mismo, unas inversiones “adecuadas para los contenedores culturales valencianos: IVAM, Palau de les Arts, Sant Pius V y Palau de la Música”.