La concejala de Bienestar Social, Maica Hurtado, ha señalado que “durante el pasado fin de semana se ha alcanzado un pico en cuanto a la afluencia de personas al albergue municipal, atendiendo a una media de 55 o 56 usuarios cada noche. El albergue municipal, gestionado por Cáritas, cuenta con una capacidad de 39 personas, que se amplía en una veintena de plazas más con el protocolo del frío activado desde el 1 de noviembre. De esta manera llega hasta las 59 plazas, para afrontar nuevos episodios de bajas temperaturas”.
“Es importante estar siempre preparados, ante cualquier imprevisto, para conseguir dar una respuesta inmediata a quienes se acerquen al albergue”, ha recalcado.
La edila ha insistido en que “la prioridad del gobierno municipal es la de proteger y atender a las personas en situación de vulnerabilidad o desamparo, más aún en esta clase de episodios meteorológicos”.
Un compromiso que se pudo comprobar con la última visita realizada por parte de la Alcaldesa de Castellón, Begoña Carrasco, y la concejala de Bienestar Social, el pasado mes de diciembre, para anunciar un aumento del presupuesto destinado en 2024 al mismo, pasando de 567.000 hasta llegar a los 600.000 euros, a través de un nuevo convenio con Cáritas.
Finalmente, Maica Hurtado ha subrayado que “las personas que se son atendidas en el albergue municipal tienen también acceso a otros servicios como el de lavandería, desayuno, cena o ducha. Desde el pasado fin de semana cuando ya empezaron a bajar las temperaturas han aumentado las atenciones, tanto de pernoctas como de recogida de comida y en estos momentos ha aumentado entre un 15% y un 20% el número de personas que se atienden en el comedor. Y existen programas específicos de servicios sociales para el acogimiento de personas con necesidades especiales, mujeres o familias con menores a su cargo”.
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