El Ayuntamiento de Valencia ha iniciado la implementación del equipamiento y logística para la Zona de Bajas Emisiones, que entrará en funcionamiento el 1 de diciembre de 2025. Este sistema tiene como objetivo monitorizar el tráfico vehicular en puntos de control, identificando tipos y etiquetas de vehículos, así como su procedencia. La medida busca elaborar estudios estadísticos sobre patrones de movilidad y evaluar el impacto de políticas que fomenten la movilidad sostenible, como el aumento del transporte público y la creación de carriles bici. La concejala de Innovación, Paula Llobet, destacó que esta acción se realiza a pesar de la falta de aprobación definitiva de la Ordenanza Reguladora correspondiente. El proyecto incluye estaciones para medir la calidad del aire y un análisis exhaustivo de la contaminación en la zona.
El Ayuntamiento de València ha dado un paso significativo hacia la implementación de su Zona de Bajas Emisiones (ZBE) al aprobar la puesta en marcha del equipamiento y la logística necesarios para su funcionamiento. Este sistema, que entrará en vigor el 1 de diciembre de 2025, tiene como objetivo principal monitorizar el tránsito vehicular en puntos estratégicos de la ciudad.
La finalidad es monitorizar los pasos de los vehículos que circulan por cada punto de control, identificando tanto las etiquetas como la tipología de los mismos, además de su lugar de registro o procedencia. Esta medida busca facilitar la elaboración de estudios estadísticos que permitan identificar patrones de movilidad y evaluar la evolución del parque móvil, así como los efectos que tendrán las políticas destinadas a fomentar una movilidad más sostenible.
La Junta de Gobierno Local ha aprobado el contrato para el suministro del sistema de gestión y control necesario para la ZBE. La concejala de Innovación, Paula Llobet, ha señalado que esta implementación se llevará a cabo “sin perjuicio de que no haya podido ser objeto de aprobación definitiva plenaria el texto de la Ordenanza Reguladora” correspondiente.
El servicio de Movilidad ha coordinado este esfuerzo dentro del marco establecido por la Estrategia del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, financiado por la Unión Europea a través del programa Next Generation EU. Gracias a esta colaboración, se han suministrado e instalado los equipos requeridos y desarrollado las aplicaciones informáticas necesarias para poner en marcha la Zona Bajas Emisiones según lo previsto.
El proyecto incluye varias medidas clave, tales como:
Con estas acciones, València avanza hacia un futuro más sostenible, buscando reducir las emisiones contaminantes y mejorar la calidad del aire para sus ciudadanos.
La finalidad es monitorizar el paso de los vehículos que circulan por cada punto de control, identificar las etiquetas y tipología de los mismos, así como su lugar de registro o procedencia.
Se elaborarán estudios estadísticos que permitan identificar patrones de movilidad, estudiar la evolución del parque móvil y los efectos que sobre el mismo tendrán la aplicación de políticas de fomento de la movilidad sostenible.
El sistema comenzará a funcionar el 1 de diciembre de 2025.
El proyecto contempla medidas como la delimitación del perímetro de la ZBE, estaciones de medición de calidad del aire, información general sobre la zona, análisis de coherencia con proyectos preexistentes y evaluación de la contaminación.
El servicio de Movilidad ha coordinado la ejecución del contrato para el suministro del sistema necesario para la implantación de la Zona de Bajas Emisiones.