La Universidad Miguel Hernández (UMH) ha inaugurado un laboratorio de seguridad biológica de nivel 2 en el campus de Elche, específicamente en la Sala Von Humboldt del edificio Torregaitán. Esta nueva infraestructura permitirá al Instituto de Investigación, Desarrollo e Innovación en Biotecnología Sanitaria de Elche (IDiBE) llevar a cabo investigaciones sobre enfermedades infecciosas utilizando agentes patógenos de riesgo moderado. Entre los proyectos iniciales se incluyen el desarrollo de nuevas vacunas contra el virus respiratorio sincitial y la creación de antibióticos para combatir la resistencia bacteriana. El laboratorio cuenta con estrictas medidas de biocontención y será dirigido por la experta en virología María del Mar Ortega-Villaizán. La inauguración resalta la importancia de contar con instalaciones avanzadas para abordar retos en salud humana y animal.
El Instituto de Investigación, Desarrollo e Innovación en Biotecnología Sanitaria de Elche (IDiBE), perteneciente a la Universidad Miguel Hernández (UMH), ha dado un paso significativo en la investigación de enfermedades infecciosas con la inauguración de un laboratorio de contención biológica de nivel 2. Este nuevo espacio se encuentra ubicado en la Sala Von Humboldt del edificio Torregaitán, en el campus de Elche.
La apertura del laboratorio permitirá al IDiBE desarrollar diversas líneas y proyectos de investigación utilizando agentes patógenos que requieren este nivel específico de contención. Entre los asistentes a la ceremonia inaugural se encontraban el vicerrector de Investigación y Transferencia, Ángel Carbonell Barrachina; el vicerrector de Infraestructuras, Pedro Vicente Quiles; y el director del IDiBE, Antonio Ferrer Montiel. Durante el evento, se subrayó la relevancia de contar con una infraestructura como esta en el campus, que fortalece la capacidad del IDiBE para abordar proyectos más ambiciosos dirigidos a enfrentar desafíos en salud humana y animal.
A finales del año pasado, el laboratorio recibió un informe favorable por parte del Instituto Carlos III, cumpliendo así con los requisitos establecidos por la legislación vigente en materia de bioseguridad. Esta instalación ha sido clasificada como contención biológica nivel 2 (NCB2), lo que permite trabajar con agentes patógenos moderadamente peligrosos para las personas y el medio ambiente. Uno de los primeros proyectos que se llevarán a cabo en este laboratorio consistirá en probar nuevas vacunas contra el virus respiratorio sincitial (VRS), en colaboración con el Hospital General Universitario de Elche. Otro proyecto se enfocará en diseñar nuevos antibióticos para combatir la resistencia a tratamientos existentes.
El laboratorio NCB2 está diseñado como una instalación restringida que incluye una antesala para la preparación del personal y dos salas de trabajo: una dedicada a investigaciones con virus y otra destinada al estudio de bacterias. Ambas áreas están equipadas con medidas de seguridad necesarias para proteger tanto a los usuarios como al medio ambiente. Entre estas medidas se encuentran cabinas de seguridad biológica tipo II, un sistema exclusivo de ventilación que mantiene presión negativa dentro del laboratorio para prevenir fugas al exterior, así como una unidad de tratamiento del aire equipada con filtros HEPA.
La dirección del laboratorio recae sobre la profesora María del Mar Ortega-Villaizán, experta en virología, quien cuenta con el apoyo técnico de María Lourdes Renart Pérez para su gestión. Renart Pérez ha recibido formación específica en la administración de laboratorios NCB2, asegurando así un funcionamiento seguro y eficiente del nuevo espacio.
Es un laboratorio de contención biológica de nivel 2, inaugurado por el Instituto de Investigación, Desarrollo e Innovación en Biotecnología Sanitaria de Elche (IDiBE) en la Universidad Miguel Hernández (UMH), destinado a investigar enfermedades infecciosas.
El laboratorio permitirá abordar proyectos de investigación utilizando agentes patógenos que requieren este nivel de contención. Uno de los primeros proyectos será probar nuevas vacunas contra el virus respiratorio sincitial (VRS) y otro se centrará en diseñar nuevos antibióticos para combatir la resistencia a tratamientos actuales.
El laboratorio está equipado con cabinas de seguridad biológica tipo II, un sistema de ventilación que mantiene presión negativa para evitar fugas, y una unidad de tratamiento de aire con filtros HEPA. Además, el personal que trabaja allí recibe formación específica sobre bioseguridad.
La profesora María del Mar Ortega-Villaizán, experta en Virología, es la responsable del laboratorio, apoyada por María Lourdes Renart Pérez en su gestión.