En esta primera sesión del Consejo Rector, su presidente, Pere Fuset, ha pedido a los representantes de los diferentes grupos políticos “el apoyo y el respeto a un organismo integrado por voluntarios y voluntarias directamente elegidos por las fallas”, así como “la necesidad de salvaguardar las Fallas de los debates políticos respetando su autonomía y pluralidad”.
Igualmente, ha manifestado el compromiso por “avanzar en el proceso de transformación digital de JCF”, con el inicio de la formación y de los trabajos previos a formalizar e implantar de manera progresiva la plataforma PIAE del Ayuntamiento para la gestión administrativa diaria del organismo autónomo, “lo que permitirá ganar en agilidad administrativa y en transparencia”, una transformación digital que, si bien ha calificado como “imprescindible”, es “especialmente compleja” en este organismo autónomo “dada la gran cantidad de expedientes trabajados tanto por personas voluntarias como por las comisiones falleras”.
Del mismo modo, en el apartado de ruegos y preguntas, se ha tratado la recuperación del proyecto para llevar adelante un estudio de impacto económico de las Fallas, sobre el cual ha incidido Fuset manifestando su voluntad de llevarlo adelante con la colaboración de las comisiones falleras, extremo en el que también ha coincidido el resto de grupos políticos.