El alcalde se ha dirigido en el acto a los niños y niñas que están viviendo el verano en Valencia para decirles que “estamos seguros de que vais a disfrutar de una inolvidable estancia en Valencia, un tiempo diferente para conocer y compartir, para descubrir lugares distintos, otras formas de vivir, de comer, de jugar, en una grata experiencia de viaje y convivencia que deseamos que recordéis durante mucho tiempo como un periodo muy feliz de vuestras vidas”.
El proyecto pretende mejorar las condiciones de vida tanto de los refugiados saharauis como del resto de la población residente en el Sáhara Occidental, actualmente ocupado por Marruecos. El programa es llevado a cabo gracias a la Federación de Asociaciones de Solidaridad con el Pueblo Saharaui del País Valenciano (FASPS-PV), organización no gubernamental inscrita en el Registro de Asociaciones de la Generalitat Valenciana y creada en 1994.
Durante el acto solidario Joan Ribó ha recordado con cariño cuando acogió a una niña saharaui, y ha afirmado que “para nosotros este es un acto entrañable. Yo quiero manifestar la profunda satisfacción de tener a los niños y niñas con nosotros porque es un acto de solidaridad. El pueblo español tiene una gran deuda con el pueblo saharaui y lo mínimo que podemos hacer es que los niños estén aquí y podamos ayudarles. Además, estamos gestionando el hermanamiento con una ciudad del Sáhara y trabajaremos en este sentido”.
A las declaraciones del alcalde se han sumado las de las niñas Zahara, Salka y Nadifa, quienes han manifestado lo mucho que les gusta pasar aquí el verano. El delegado en la Comunidad Valenciana del Frente Polisario, Habibulah Mohamed, ha querido agradecer públicamente el gesto solidario del Ayuntamiento de Valencia y ha hecho una llamada al Estado español para que se solucione políticamente el problema real del pueblo saharaui”.
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